LOS PROPÓSITOS PARA EL NUEVO AÑO
- Objetivos del año nuevo
El último toque de las campanadas, la última uva, el pistoletazo de salida de una carrera llena de buenos propósitos, empezar de cero, con todas nuestras buenas intenciones y deseos de cambio.
Es evidente que los primeros días de enero de otros años se llenan los gimnasios, más gente deja de fumar y después de Reyes casi todos empezamos una dieta que luego no se mantiene durante mucho tiempo.
- Por qué los abandonamos
Porque los propósitos suelen ser hábitos, y los hábitos son un proceso, y lo que es aún peor, queremos instaurar un hábito saludable “encima” de otro de la misma naturaleza que no lo es. Es como escribir en una pizarra que no está borrada o aún queda tiza en ella. No lo hacemos con claridad.
Los hábitos saludables tienen efectos positivos, pero más a largo plazo, mientras que los no saludables nos dan recompensas a muy corto plazo, respondiendo a unas necesidades inmediatas, pero a medio y a largo plazo nos perjudican.
En resumidas cuentas, los abandonamos por el estrés de no cumplirlos a diario, de no instaurar el hábito positivo, la culpa y por consiguiente la disminución de la autoestima que conlleva.
- Cómo hacer para mantenerlos
Primero hacer una lista lo más realista posible, bien definida, corta y alcanzable.
Si lo hacemos al revés sería como subir una escalera de 200 pisos en un minuto y sin tocar la barandilla, o intentar subir una montaña muy alta sin estar preparados y sin el equipo adecuado. La motivación disminuye y la fuerza de voluntad no es capaz de tirar de ese carro, por lo tanto, es la pescadilla que se muerde la cola. Aquí empiezan a aparecer las excusas, el estrés, el cansancio, etc.,
Es muy importante saber es qué es lo que nos motiva para el cambio, el objetivo, la meta, y sobre todo ser honestos con nosotros mismos. Es fundamental fijarnos en el proceso. Empezar siempre por lo más fácil, lo que menos nos cueste.
Echar la vista atrás hacia las metas que hemos conseguido en el pasado nos ayudará a saber cuáles son nuestros puntos fuertes para alcanzar los nuevos.
Empezar un plan de acción y ser constante, apuntar tus logros diarios nos ayudará a llegar a la meta
- Inculcárselo a los más pequeños
Como nosotros, hacer una lista de lo que quieren conseguir este año, hablar con ellos acerca de cómo podrían lograr esos buenos deseos, ningún niño quiere ser “malo” o defraudar a sus padres. Que ellos elijan por lo que quieren empezar, siempre cortos y fácilmente evaluables.
Los beneficios son enormes, ya que estamos inculcando que para alcanzar una meta hace falta esfuerzo, perseverancia, no tirar la toalla, los niños que son capaces de aprender algo nuevo que les costaba, o que han luchado por algo y al final lo han conseguido son los que presentan una autoestima más alta y son capaces de enfrentarse a nuevos retos de una forma más saludable, teniendo en cuenta que dentro del proceso también habrá escollos y dificultades y que no deben tirar la toalla nunca, el proceso a veces es más importante que el resultado, nos hace aprender más y prepararnos para el día a día.